diumenge, d’abril 03, 2011

EL SOCIALISTA



EL SOCIALISTA. 125 AÑOS DESPUÉS.


Hoy he recibido la edición especial de los 125 años de la revista El Socialista y ojeando ésta con nostalgia reflexiono lo que a mi modo de pensar
significa compromiso individual, ejemplo colectivo y humildad en las formas.

¿Dónde queda Pablo Iglesias? ¿Dónde Julián Zugazagoitia, Fernando de lo Rios, Julián Besteiro, Indalecio Prieto, Andreu Nin, Joaquín Maurín o Ernest Lluch?

Permitirme evocar unos recuerdos en una escuela de formación en Tarragona, cuando Ernest Lluch dejó de ser Ministro de Sanidad en el gobierno de Felipe Gonzalez y yo un recién chaval afiliado al PSC y a las JSC lo vi llegar con un R11 Rojo, tuve ese día el privilegio de compartir la mesa con él, con Salvador Giner y con Victoria Camps, no fue tan sólo una clase magistral, sino que fue una lección de humildad, de compromiso y de visión de futuro.

Ha llovido tanto desde entonces, que casi no reconozco ni a mi partido, y no por que en estas elecciones municipales se escondan nuestras estimadas siglas PSC, de las que tan orgulloso me siento, cuando alguien reniega de sus orígenes algo tiene que esconder o que perder, y nuestros alcaldes, diputados y concejales deberían recordar que si están ahí teniendo el privilegio de representar y decidir por la ciudadanía con sus recursos, con su dinero y con su imagen, es por que hay un partido detrás que les ha dado esa plataforma y ese trampolín.

Un partido plagado de sacrificios individuales, de sangre, de destierros, de lucha, de dolor, pero un partido sobre todo lleno de orgullo de ser consciente que representamos y que debemos representar no sólo la consecución del poder, sino la trasformación social, económica y de libertad de generaciones y generaciones, quien esconda todo eso, declara bien sus objetivos, sólo poder.

Yo quiero seguir gobernando con los valores de todos los socialistas que me han precedido, yo quiero seguir gobernado con los valores que hoy están enterrados en las cunetas, fusilados, repatriados, con la mujeres oprimidas en las cárceles, con los compañeros que realmente lucharon delante de los grises. Yo quiero gobernar con los valores que crearon este modelo de Estado de bienestar, los que lucharon por la igualdad de género, los que lucharon por un sistema sanitario universal, por una educación pública y de calidad, por una España Federal, al margen de sus egoísmos individuales e intereses particulares.

La política significa sacrificio por el colectivo, se pueden perder unas elecciones, no pasa nada, pero no se puede renunciar a las ideas de libertad, igualdad y justicia social que siempre representarán nuestras siglas PSC.